Ponemos medio dedo de agua en el recipiente donde colocaremos el cochinillo de espaldas. Echamos sal de manera generosa.
Introducimos la bandeja en un horno precalentado a 180º durante 90 minutos.
Sacamos el cochinillo para darle la vuelta, picarle suavemente la piel con un tenedor y volver a echar un poco de agua.
Lo volvemos a introducir y esperamos 90 minutos, hasta que dore.
Para finalizar, preparamos la salsa con el propio jugo agregando sal.